Los datos registrados por ENAIRE entre enero y julio indican una mejora en la eficiencia de su red de rutas, lo que ha resultado en la reducción de las distancias de vuelo, un ahorro de combustible para las aerolíneas y una disminución en la contaminación ambiental en el transporte aéreo. Este logro se produce a pesar del aumento generalizado en el número de vuelos en comparación con años anteriores.
La mayor eficiencia de vuelo se produce como consecuencia de las mejoras promovidas por ENAIRE en sus planes estratégicos (Plan de Vuelo 2020 y Plan de Vuelo 2025), entre las que destacan la optimización de rutas aéreas; la modernización de los procedimientos de espacio aéreo, con un aumento del número de descensos continuos; la aplicación de nuevas tecnologías, con apoyo de los sistemas de navegación por satélite en las aproximaciones; y la cada vez mayor coordinación civil-militar que favorece un Uso Flexible del Espacio Aéreo.
La aplicación de todas estas medidas ha permitido que solo en los siete primeros meses de 2023 (enero-julio) se hayan dejado de volar 118.000 millas náuticas (218.000 kilómetros): es decir, el equivalente a casi 5,5 vueltas al perímetro de la Tierra. Como consecuencia de esta reducción de las distancias voladas se han dejado de emitir 4.000 toneladas de CO2 a la atmósfera y se han ahorrado 1.300 toneladas de combustible.
Especial mención merece la autorización de descensos continuos para reducir el consumo de combustible y las emisiones contaminantes durante la fase de aproximación y aterrizaje de los aviones. Entre enero y julio, ENAIRE autorizó de media el 35% de operaciones en descenso continuo en los aeropuertos españoles, frente a una media de los principales aeropuertos europeos del 14% en el mismo periodo.
En los últimos cinco años, entre 2017 y 2022, la mejora progresiva en la gestión del tráfico aéreo por parte de ENAIRE, ha conseguido ahorrar más de 8 millones de millas náuticas, lo que equivale a 380 vueltas a la Tierra y haber evitado que se emitirán a la atmósfera casi 285.000 toneladas de CO2.
Green Sky
La estrategia de sostenibilidad de ENAIRE, denominada Green Sky, enfoca sus esfuerzos en tres líneas de actuación: reducción de emisiones a la atmósfera (Fly Clean); atenuación de los niveles sonoros y reducción de la afectación sobre la biodiversidad en el entorno de los aeropuertos españoles (Fly Quiet); y mejora de la gestión medioambiental de sus propios centros e instalaciones desplegadas en toda España (Eco-ENAIRE).
La línea de actuación Fly Clean apunta directamente a la mejora de la eficiencia en vuelo y su consecuente reducción del consumo de combustible y de las emisiones. Los procedimientos basados en técnicas de navegación por prestaciones (PBN) con tecnología satelital y la coordinación con el Ministerio de Defensa en el impulso del concepto de Uso Flexible de Espacio Aéreo son ejes de actuación claves para mejorar la eficiencia. Del mismo modo, ENAIRE trabaja en la implantación del concepto “Free Route”, contemplado en el Cielo Único Europeo, que permitirá volar trayectorias directas más eficientes. Como resultado de estas acciones la eficiencia en la red de rutas ha mejorado respecto años anteriores, a pesar del incremento de tráfico aéreo.
Fly Quiet: mejora acústica
Esta iniciativa está enfocada a la mejora de la afección acústica sobre las poblaciones cercanas a los aeropuertos. ENAIRE estudia de forma sistemática el impacto ambiental de todos sus diseños de maniobras de vuelo con la voluntad de introducir mejoras en las trayectorias de aproximación y despegue, que alejen el sobrevuelo sobre las poblaciones, y reducir al máximo los niveles sonoros generados por las aeronaves.
En el marco del compromiso de ENAIRE con la mejora de la afectación acústica sobre la población, participa activamente en grupos de trabajo con AESA, Dirección General de Aviación Civil y Aena. En este aspecto se ha conseguido definir una metodología para el diseño de estudios acústicos comunes, unificando los criterios y parámetros en la elaboración de huellas acústicas en el sector aéreo.
Eco-ENAIRE: la sostenibilidad en los centros propios
Esta iniciativa recoge la mejora en la gestión ambiental en ENAIRE mediante la dotación de energía renovable para autoconsumo en todos los centros de control aéreo y las principales instalaciones de navegación aérea. Se está optimizando el consumo de iluminación mediante tecnología LED y se está implementando un plan para descarbonizar la flota de vehículos.
En esta misma línea, ENAIRE seguirá contratando el 100% de su suministro eléctrico con garantía certificada de origen de fuentes renovables, medida que le ha permitido, desde el año 2015, un ahorro de más de 110.000 toneladas de CO2.
También está previsto el despliegue de instalaciones fotovoltaicas de autoconsumo con el fin de contribuir al uso de energías renovables. Ya han entrado en funcionamiento las instalaciones fotovoltaicas de los centros de control de Sevilla y Canarias y ya se está trabajando en los de Madrid y Barcelona.
Además, el aerogenerador instalado en el Centro de Control de Canarias suministró, durante 2021, más del 40% del consumo energético que necesita la citada dependencia. En conjunto, las instalaciones fotovoltaicas ya instaladas en los centros de control de ENAIRE, junto con la energía generada por el aerogenerador, suponen el 40% del consumo de estas instalaciones y el 6,2% con respecto al consumo total de ENAIRE.
Globalmente, estas instalaciones fotovoltaicas generarán anualmente cerca de 4 GWh, lo que supone un ahorro del 18% del consumo eléctrico generado en esas dependencias y el 13,7% con respecto al consumo total de ENAIRE.
Actualmente se ha sustituido la flota de vehículos en un 17% y Registrado la Huella de Carbono de ENAIRE para 2019, 2020 y 2021.