¿Puede ser eficaz el reconocimiento automático de la voz en un ámbito tan sensible para la seguridad como el control del tráfico aéreo? Desde hace varios años, el Centro Aeroespacial Alemán (Deutsches Zentrum für Luft- und Raumfahrt; DLR) es pionero en sistemas basados en IA para el reconocimiento y la comprensión automáticos del habla dirigidos a la exigente comunicación por radio, crítica para la seguridad, en el sector de la aviación. EML Speech Technology GmbH, proveedor de productos y servicios informáticos de Heidelberg, adquiere ahora bajo licencia esta innovadora tecnología del DLR. EML pretende ofrecer productos para el reconocimiento y la comprensión del habla en el ámbito del control del tráfico aéreo y pondrá a disposición del mercado el «Entendedor del habla» de DLR en combinación con su propio «Reconocedor del habla».
La primera aplicación prevista de esta tecnología por EML es en aeropuertos. Los controladores aéreos, que actualmente introducen sus órdenes manualmente, se beneficiarán de una menor carga de trabajo, lo que les permitirá centrarse directamente en el avión en lugar de en las pantallas. «Nuestra tecnología ya está madura y lista para su uso en la gestión operativa del espacio aéreo», afirma Dirk Kügler, Director del Instituto de Guiado de Vuelo del DLR. «Estamos encantados de que EML desarrolle ahora nuevas soluciones para el control del tráfico aéreo basadas en la tecnología del DLR«.
Entender la comunicación por radio para descargar a los controladores aéreos
La comunicación verbal entre controladores aéreos y pilotos es esencial para mantener altos niveles de seguridad en el tráfico aéreo. Los sistemas derivados de la IA que analizan automáticamente la comunicación por radio con las instrucciones del controlador y las confirmaciones del piloto pueden servir de apoyo eficaz a los controladores aéreos.
El DLR Institute of Flight Guidance de Braunschweig ha desarrollado un sistema capaz de analizar las palabras del tráfico de radiocomunicación detectadas por el sistema de reconocimiento de voz EML y comprender a continuación su contenido semántico. Esta interpretación precisa del contenido de las instrucciones del controlador al piloto es la base para suministrar a los sistemas digitales de control del tráfico aéreo los datos correctos, como el indicativo de llamada de la aeronave. Se espera que, en última instancia, este tipo de información conduzca a la creación de aplicaciones que ayuden a los controladores aéreos a encontrar vuelos, por ejemplo, proporcionando instrucciones en la pantalla del radar o eliminando la necesidad de introducir datos manualmente. Estos sistemas también pueden verificar si el piloto ha entendido y aplicado correctamente las instrucciones del control aéreo. En el futuro, los asistentes digitales con capacidad de comprensión de voz ofrecerán ayuda a los controladores aéreos para guiar a las aeronaves de forma similar a un colega humano.
«Nuestro sistema de comprensión del habla puede reducir la carga de trabajo de los controladores aéreos», afirma Hartmut Helmke, uno de los principales científicos del DLR en el campo de la comprensión del habla en el control del tráfico aéreo. «En tiempos de escasez de mano de obra cualificada y creciente demanda de tráfico, el alivio que proporciona la comprensión del habla puede contribuir a una guía de vuelos más eficiente y a un tráfico aéreo más sostenible desde el punto de vista medioambiental».
Tanto la eficacia como las credenciales ecológicas de la tecnología han quedado demostradas en el Instituto de Guía de Vuelo, donde se realizaron extensas pruebas con controladores aéreos en diversos entornos operativos. Gran parte de esta investigación se llevó a cabo en el contexto de los proyectos internacionales SESAR y fue financiada por la empresa común SESAR 3, una asociación europea institucionalizada para hacer realidad el Cielo Digital Europeo a través de la investigación y la innovación.
Los estudios de simulación realizados con datos de laboratorio y reales demostraron que estos sistemas podían reducir en un factor de 30 el número de entradas manuales requeridas por los controladores. Esta mejora se aplica a varios entornos de control del tráfico aéreo, como los vuelos en ruta, el control de aproximación y salida y la gestión del rodaje de aeronaves. El resultado es una reducción de la carga de trabajo y un mayor conocimiento de la situación. El Instituto de Guía de Vuelo ha demostrado que esta reducción de la carga de trabajo permite una gestión más eficaz del tráfico, consiguiendo un ahorro de hasta 60 litros de combustible de aviación por aproximación en las proximidades de los aeropuertos.