Gabinete de Prensa SPICA.- SPICA, el Sindicato Profesional Independiente de Controladores Aéreos nacía en noviembre de 2007 en el centro de control de Madrid, en Torrejón de Ardoz. Teníamos un gran objetivo: impulsar el desarrollo de nuestra profesión, ofrecer apoyo a nuestros afiliados y aportar soluciones a los problemas a los que nos enfrentábamos en nuestro día a día. Se daría inicio, además, a un blog que pretendía ser el escaparate donde mostrar todo nuestro trabajo y que sirviera de enlace entre todos los controladores aéreos españoles, estuvieran o no afiliados a nuestro sindicato.
Hace unos meses, nuestro Sindicato Profesional Independiente de Controladores Aéreos estrenaba nueva imagen. Y empezamos a crecer aun más en nuestros cometidos. Hemos sido testigos de los muchos problemas que afectaban a otros colectivos de controladores repartidos por todo el mundo y con los que nos hemos solidarizado, como los controladores marroquíes y los que fueron detenidos en África; denunciamos en su día la progresiva degradación de las condiciones laborales del sector aéreo y asimismo, hemos comprobado en primera persona, las consecuencias de la pandemia que han continuado afectando al sector de la aviación y especialmente a la puntualidad de los vuelos, que se ha visto trastocada debido a diferentes factores derivados del cambio de organización y escasez de recursos en los aeropuertos. Hemos puesto en duda la viabilidad de las torres aéreas de control remoto, porque pensamos que es una cuestión que se mantiene desde hace más de una década en el aire por las controversias que éstas generan, y nos hemos puesto en alerta cuando fuimos conscientes de la posible caída sin control de los restos de un cohete chino.

Pero también estamos orgullosos del éxito en la celebración de nuestro XIV Congreso anual en Sevilla el pasado 25 de Noviembre, durante el que se abordaron cuestiones tan relevantes como la valoración del Sindicato de la propuesta por parte de USCA-ENAIRE del preacuerdo del III Convenio Colectivo Profesional y donde debatimos largo y tendido sobre las líneas estratégicas de SPICA y la situación de la Torre Remota del aeropuerto de Menorca, de cuyas declaraciones se han hecho eco distintos medios y grupos políticos, llegando incluso al Senado.
Desde Sevilla la dirección de SPICA quiso trasladar la preocupación e incertidumbre de parte del colectivo de Controladores aéreos ante las consecuencias que podrían derivarse de la premura en la firma del preacuerdo del III Convenio Colectivo Profesional, y donde solicitamos a nuestros compañeros de USCA, postponer una respuesta hasta disponer de una base firme para la negociación y un mayor espacio de tiempo para valorar en profundidad que repercusiones traería de la firma del mismo. Lamentablemente el preacuerdo siguió adelante con el beneplácito de los miembros de este otro sindicato.

Pero sin duda, si hay un hecho que ha marcado este año 2022, ha sido la absolución definitiva por parte de la Audiencia Provincial de Madrid, de los 131 controladores aéreos que habían sido condenados por el aparente abandono de sus puestos de trabajo, aquél 3 de diciembre de 2010, y de entre ellos, los 14 + 1 pertenecientes en gran parte a la familia de SPICA. Un grupo de controladores que nunca se rindieron y decidieron recurrir una sentencia, a pesar de haber sido condenados por el Juzgado de lo Penal número 18 de Madrid, por un delito de supuesto abandono del puesto de trabajo, y a los que por fin, la Justicia dio la razón.
Por todo esto, hoy volvemos a recordar las palabras de nuestro Secretario General Tomas Vírseda, cuando asegura que SPICA va a continuar siempre en la lucha de la defensa de los derechos de los compañeros controladores, “como siempre hemos hecho”.
Hoy brindamos por un nuevo año cargado de proyectos y por haber encontrado otra forma de hacer sindicalismo.
SPICA OS DESEA UN FELIZ AÑO 2023