Cada suicidio de un controlador aéreo español será acogido con gran alegría en las oficinas de Aena, en los despachos del Ministerio de Fomento, en ciertas consultoras (objetivo cumplido ¿verdad chicos?), entre tertulianos sabelotodo...
Las jugosas privatizaciones están detrás del telón. Intereses económicos astronómicos entran en juego y la vida de las personas no vale nada en comparación.
Un pequeño estudio de las barbaridades legales perpetradas contra los controladores aéreos. “Ningún derecho fundamental es absoluto, o dicho de otro modo, todos los derechos son limitados”.
Union Busting a los controladores aéreos. Se trata de quitarles cualquier derecho y hacer que las empresas se conviertan en plantaciones en las que los esclavos (trabajadores), sean sometidos sin límites por los amos (empresarios).
Los controladores aéreos no provocamos el cierre del espacio aéreo español los días 3 y 4 de diciembre de 2010. Ni abandonamos nuestro puesto de trabajo.