La huelga en las torres privatizadas por Saerco continúa. La situación parece estar estancada en un punto en el que ni sindicatos ni empresa parecen dar con una solución favorable – cada uno defendiendo sus intereses. En concreto, el archipiélago canario está notando fuertemente el impacto de estas huelgas: el aeropuerto de Lanzarote no para de acumular récords día tras día por ser el que más retrasos acumula en toda Europa. Para saber la posición de Saerco frente a las huelgas y movilizaciones de los controladores, el diario Atlántico Hoy ha hablado con representantes de la empresa, quienes reconocen la difícil tesitura en la que se encuentran.
Como le cuenta Saerco a Atlántico Hoy, ellos simplemente quieren que los controladores «se den cuenta de que estamos ahí como un servicio más del aeropuerto. Hacemos el trabajo con la misma calidad que cualquier otro proveedor porque estamos certificados de la misma manera, una normativa europea muy estricta y somos igual que Enaire«.
«La situación está profundamente arraigada. Esta es la cuarta ronda de negociaciones de contrato desde que el sector privado surgió en 2012, y sigue sin resolverse. Es la primera vez que USCA, el sindicato dominante en el sector público, se involucra en nuestras instalaciones y establece expectativas que son inalcanzables para nosotros. A pesar de nuestras propuestas posteriores a su propuesta inicial, USCA no ha cedido ni un ápice en su posición, lo que ha provocado que la situación se vuelva aún más difícil», declaran.
Según Saerco, la falta de trabajadores cualificados no es un problema. «Tenemos un gran número de personas interesadas en trabajar con nosotros. El desafío radica en que en los últimos once años, el sector ha permanecido limitado y prácticamente no ha habido crecimiento en la cantidad de instalaciones que las empresas de nuestro rubro gestionan. Esto, junto con los márgenes ajustados para la acción, es el problema», añade la empresa.
Para Saerco, la solución es la liberalización
La solución al problema resulta sencilla desde la perspectiva de la empresa privada. «Este asunto podría resolverse si se continúa con el proceso de liberalización mediante la incorporación de siete nuevas torres, incluyendo tres en las Islas Canarias. Dado que es el segmento más grande, tendríamos oportunidades allí para presentar nuevas propuestas», explican los encargados de Saerco.
El contrato actual entre la empresa y Aena es rígido y afirman que esto les impone restricciones. «Las torres que tenemos son las que están disponibles y mejorar más allá de lo que ya hemos logrado resulta sumamente complicado», detallan.
Saerco afirma que conforme al acuerdo, todos los empleados tienen un sistema de trienios que implica un aumento salarial del 10% cada tres años. Además, en ese mismo período, también se realizan mejoras en las condiciones laborales de los trabajadores.
«Hasta este momento, hemos incrementado cada uno de los niveles en aproximadamente un 2%, y la propuesta que presentamos este año seguía esa línea. Básicamente, esto se traduce en un aumento salarial del orden del 16% para los trabajadores cada tres años«, explican.
«Skyway, otra empresa privada en el mismo sector, tiene lo que denominan un acuerdo central que ha estado en vigencia durante muchos años. Originalmente tenían un contrato más amplio que el actual, lo que les permitió mejorar las condiciones del convenio. Hasta ahora, indican que siguen manteniendo ese acuerdo. El sindicato busca que estas condiciones se apliquen a todo el sector y a todas las torres, independientemente de si las han tenido en el pasado o no. En nuestro caso, algunas de nuestras torres han tenido este tipo de acuerdos previamente y otras no. Sin embargo, implementar esto en nuestro convenio resulta económicamente inviable. Dado que esto se traduciría en un incremento de alrededor del 30% en cada período de tres años«, concluyen.